Al final, el video no mató a la estrella de la radio
Acabo de leer un post de Angel Jiménez sobre la muerte del email (en español), comentando la columna de Robert X. Cringely (en inglés) sobre el mismo tema. Estoy muy de acuerdo con Angel, estamos matando antes de tiempo una de las herramientas aún más usadas y eficaces de comunicación.
En general, pocas tecnologías acaban completamente con el producto o la herramienta anterior a no ser que coincidan completamente en su cometido (aunque aún hoy hay gente que compra LPs, está claro que el CD lo reemplazó). Y las redes sociales no sustituyen de manera total el uso del email, es más, lo que realmente está ocurriendo es que las diferentes opciones de comunicación se complementan.
Al final, vamos a utilizar una herramienta u otra en función de con quién, cómo y qué información estemos compartiendo. En mi caso, depende del entorno profesional, personal y de las diferencias generacionales de la persona con la que me comunico, por ejemplo:
- En Chaxpert, una compañía nueva de Internet, llena de programadores, tecnólogos, y con una edad media joven, herramientas como Yammer, RedMine y Twitter son mucho más usadas que el e-mail. La capacidad de información instantánea y la posibilidad de compartir entre todo el equipo son los elementos buscados en este caso en la comunicación.
- Colaboro en otras compañías más tradicionales, donde el email y el teléfono siguen siendo las herramientas fundamentales para trabajar. Es más, la mayor parte del tiempo de trabajo en muchos casos se realiza delante de la pantalla leyendo y escribiendo mensajes.
- Tengo la suerte de tener hijos en edad adolescente. Puedo ver ahí como las costumbres evolucionan, Tuenti, Facebook, Twitter y el SMS son los canales de comunicación más usados por ellos. Pero mi hija sabe que si quiere una respuesta rápida por mi parte el email sigue siendo el método más apropiado!
- También tengo amigos de diferentes generaciones, y aunque el email ya ha conseguido entrar en todos los usuarios de Internet, independientemente de la edad, otros canales son mucho más difíciles de asimilar. Hace unos pocos días un amigo se negó a mantener una discusión conmigo por Twitter, para él es un canal demasiado público, corto y frío para poder expresar sus argumentos con propiedad.
Es decir, me adecuo a mi interlocutor, al entorno y al tipo de información para decidir si llamo por teléfono, mando un SMS, mando un mensaje por LinkedIn u otra red social, uso Yammer o envío un Tweet. Pero sé que el email sigue siendo útil y es donde más tiempo dedico a lo largo del día. Por cierto, cualquier empresa independientemente del tamaño que no esté utilizando Yammer hoy está perdiendo una increible herramienta gratuita de comunicación y la oportunidad de facilitar la transferencia de información de manera interna.
Al final Facebook no matará al email, igual que el video no pudo matar a la estrella de la radio, y menos mal, que sigue dándome compañía en todas esas horas que paso últimamente en el coche. Aunque la canción me sigue gustando, aquí os dejo el video.